lunes, 18 de febrero de 2008

"Jefe"





Acabó mal el año pasado con la sombra alargada de un presagio fatal. La masa era un dibujo feo, cruel e inexorable sobre el fondo negro de la placa. No quise saber nada de previsiones temporales; el plazo se definía sin necesidad de magisterios más altos. Le faltaron cinco días para que hoy, 18 de febrero, celebrara su cumpleaños.

No me place el panegírico. Sólo diré que la ingente magnitud de su obra tan solo puede compararse con la serena austeridad de su vida, de la que salió, como los grandes, sin hacer ruido.

No hay una foto que defina mejor lo que sentí por él hasta su último aliento.

Doy gracias a Dios por haberlo tenido durante cincuenta años.

11 comentarios:

Sir John More dijo...

De cualquier manera, muy cerca de ti, amigo. Muy cerca. Un abrazo.

FPC dijo...

Qué puedo añadir si ya lo sabes todo. Me siento cómplice, además, por el apelativo que marca la entrada. Sé por qué. Un fortísimo abrazo.

Anónimo dijo...

Lo lamento de verdad.

Luna

Anónimo dijo...

Todavía recuerdo la última charla "larga" que tuve con él. Aún se le iluminaban los ojos con ese brillo que te produce remomorar tus vivencias sabiendo que tu interlocutor está absolutamente absorto y ávido por seguir escuchando los avatares de tu vida. Porque al fin y al cabo, su vida ( y yo que me creía que había vivido algo) puede ser perfectamente comparable a diez de las nuestras. Me apena profundamente no haber podido escuchar de su firme voz el final de aquellas vivencias de juventud, dignas del mejor guión de los Oscars.
Querido Amart, te emplazo a que me dejes seguir charlando con el "Jefe", echando un ojo a unos papelillos que se que tienes, aunque, por supuesto, unas líneas jamás podrán suplir el poder de su voz.
Y como no puede ser de otra manera y antes que las lágrimas me impidan totalmente ver lo que escribo, recordar a esa GRAN mujer que siempre ha estado junto al más grande. Mi más profunda admiración por su fuerza, coraje y amor.
Os quiero.

DIARIOS DE RAYUELA dijo...

Un muy sentido abrazo, querido amigo.

luna llena dijo...

muuuuuuaaaaaaaakkkkkkkkkkkkk!!! hoy no te voy a decir nada más, solo besos y un fuerte abrazo

Anónimo dijo...

Pues eso es tuyo para siempre. Un abrazo grande, Amart, de corazón.

Beso.

Tawaki dijo...

No creo que puedas encontrar una foto mejor, ni añadir mejores palabras que las que has escrito.

Un abrazo muy, muy fuerte.

amart dijo...

Después de un silencio prolongado cuyos motivos ya conocéis, resulta verdaderamente reconfortante constatar que los que de verdad son, están. Y esto no es una pose. Desde el fondo del corazón quiero agradecer vuestros testimonios de afecto, cariño y cercanía. Como todo lo que cala, vuestro gesto deja una impronta que no olvidaré.
Y ahora, vamos a ver si vuelvo a medir estos bitácoros pulsos. No creáis que os vais a librar de mí tan fácilmente, bribones.

Un fuerte, fuerte abrazo a todos.

francisco aranguren dijo...

Lo has tenido cincuenta años (es decir, lo has tenido y lo tendrás ya siempre). Eso es importante (yo sólo lo tuve dos, es decir, no lo tuve y he andado buscando siempre un jefe). Es bello quedar así unido, para siempre, a alguien que es parte de nosotros mismos, de lo que nosotros mismos somos. Un abrazo y mucho ánimo.

amart dijo...

Muchas gracias, amigo Francisco Aranguren. Si doy gracias por estos cincuenta años es precisamente porque soy consciente de haber gozado de un privilegio que el destino niega arbitraria e injustamente a no pocos, por desgracia tú entre ellos. Espero que lo que no pudiste vivir con tu ascendencia,pueda vivirlo con creces tu descendencia contigo.
Un fuerte abrazo y gracias de nuevo.