1ª - La nueva pipiola con cartera, la del ministerio ese, o lo que sea, que ni ella tiene pajolera idea de para qué sirve, propone la creación de una línea telefónica para que el potencial asesino de mujeres "canalice su agresividad". O sea, tipo "dígame", "¡aaaagg, la mato, la mato", "hala, hala, ya pasó, chico bueno, ya, ya". Y así, al señor a lo mejor se le pasa. Lástima de línea. Si hubiera existido el año pasado, el gobierno habría evitado la muerte de setenta mujeres.
2ª - La misma pipiola de la cosa esa, habla de miembros y miembras. A partir de ahora sólo llamaré gilipollas a las féminas que me lo parezcan. A los demás les llamaré gilipollos.
3ª - La casita de caramelo con ínfulas de ministerio, sigue, no obstante, en pie, con su pajarita dentro, tan contenta, tralará, tan feliza.
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13 comentarios:
No me sorprende el sarcasmo
Merecido se lo tiene.
¡Menuda m(i)embrilla!
Un abrazo.
Ingenioso, querido amigo, sí señor, el juego de palabras. Agudo, tú, como siempre; memos y memas, ellos y ellas, como casi siempre.
Un abrazo.
Y me pregunto...¿¿un telefono de la esperanza para ministras sin cerebro?? es una simple idea...besos de luna
Con ésta, sería perder el tiempo, luna. Como enseñar a tocar el violín a una cebra.
Besos.
Buenos días:
Es curioso el desprecio que usas al hablar ¿Por ser mujer o ser mujer y ministra o ambas cosas?
Es probable que borres el comentario, algo que entendería.
"Ésta" se llama Bibiana Aido, tiene 31 años y es ministra de un ministerio que nos va a venir muy bien a todos visto lo visto.
La traicionaron los nervios en su primera salida a escena.
La pude saludar el otro día y no está al frente de un ministerio por su cara bonita, te lo aseguro.
!ay, ay ! luna llena, no hay mayor enemigo para una mujer que otra mujer ¿será posible?
También soy La Luna y en ésta caso, me da pena serlo
Pues no, luna, ni es desprecio (eso lo presupone tu visión sesgada), ni por se mujer (eso parece dictarlo tu trasnochada idea del feminismo), ni voy a borrar el comentario (porque nada me gusta más que la libertad de expresión).
Me conformaré con proponerte a la subsecretaría de tan glorioso ministerio.
Por cierto, "ésta" es un pronombre. Si no sabes lo que es, consulta el diccionario.
A mí me alucina mucho más que este caso puntual de las miembras, el hecho de que estos cambios artificiales del diccionario se vengan produciendo desde hace mucho, y que muchas, muchísimas personas en este país los hayan considerado como algo sagrado, algo que sólo discuten los machistas redomados, entre los que, de ser éste el caso, me encuentro. No tengo duda de que hay que conseguir que al hablar con los genéricos todos pensemos en masculino y también en femenino, aunque eso creo que se consigue con alguna que otra referencia periódica a lo femenino (cuando el género del genérico sea masculino) pero, sobre todo, con la educación. Y quienes en el gobierno y en la oposición dedican su tiempo a vainas como ésta sólo tratan de ganarse una imagen vacía, y por supuesto de tapar su manifiesta inutilidad a la hora de mejorar la educación y resolver el problema. Abrazos, también a Luna, aunque creo que raro, muy raro es el ministro, y también la ministra, que no está en el gobierno por su cara bonita. De entre los cargos políticos, la gente eficaz y honrada constituye un porcentaje prácticamente despreciable, nunca mejor utilizado el adjetivo...
Así es, Sir. Como casi siempre, comparto tu criterio y admiro la ponderación que exhibes en tus argumentos. Lo que pasa es que a mí me hierve la sangre ante memeces de este calibre. Pero claro, habrá que resignarse, sobre todo cuando en España no hay problemas más graves que resolver.
Un abrazo.
Si no fuera para morirse de pena, sería para morirse de risa.
El problema es que cualquiera de las dos muertes, las pagamos todos, y encima no podemos protestar del servicio.
Lo de las "miembras" es una estupidez, pero lo del teléfono es indignante...
Beso, Amart.
No recuerdo quien decía que a partir de ahora gilipolla solo se lo diría a las mujeres, reservando par los hombres, gilipollo
Yo tampoco sé quién diría eso, pero lo comparto.
Un abrazo.
Creo que yo ya no puedo decir más sore el tema después de lo que escribí en mi artículo. Creo que todo se está llevando al terreno de la confrontación entre hombres y mujeres y así nunca llegará la tan deseada igualdad. Dije que este ministerio no hacía ninguna falta y me reitero en ello. Si se quiere la igualdad hay que partir de las mismas bases usadas para los hombres, lo único que hace falta es hacer cumplir las leyes que dicen que todos tenemos los mismos derechos, sin olvidar también las mismas obligaciones.
Un saludo.
Parece ser que la máxima aspiración de algunos sectores indebidamente autoproclamados "feministas", consiste en conseguir el mismo poder que secularmente han ejercido los hombres sobre las mujeres. Mal vamos así, cambiando de polo esa suerte de fundamentalismo, tan solo por un absurdo afán de revancha.
Gracias por tu comentario, Leodegundia.
Saludos.
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